La grafología podemos decir que es la ciencia que estudia la personalidad de un individuo a través del estudio de su escritura.Seguramente sea tan antigua como la propia escritura. En China la consideraban algo sagrado, Aristóteles ( 384-322 a.c) mostraba interés por las conexiones que hay entre la personalidad y la escritura “La escritura es un símbolo del habla y esta última es un símbolo de una experiencia mental”. En el renacimiento con la creación de las universidades, la escritura se extendió de manera generalizada.
A todos nos gusta escribir, y no es lo mismo escribir una carta a un amigo, a una pareja, a los padres, un contrato, un libro, un informe, etc. En una carta dirigida a un amigo o a la pareja plasmamos nuestros sentimientos, en el escrito transmitimos toda la información que llevamos dentro y que marca nuestro carácter. El papel es el vehículo de transmisión.
Los grafólogos lo primero que hacen al analizar un escrito es mirar lo que se llama “visión de conjunto”, esta visión ofrece un estado general de la persona que ha realizado ese escrito, a partir de ahí se analizarán los detalles:
La legibilidad de la letra, hay que tener en cuenta las circunstancias y en qué condiciones se ha realizado el escrito.
La ejecución, se analiza el grado de perfección con que se ha escrito cada letra; para ello se aíslan las letras y tapando las de alrededor para saber si cada una, por separado es legible, a veces al leer por ejemplo una carta en conjunto es legible, pero al analizar letra a letra se pierde la claridad. La claridad en los trazados y en su ejecución indican que la persona tiene un carácter mas templado, constantes y perseverantes.
Distribución del texto , crestas, pies, puntos acentos, otros signos ortográficos, escritura condensada entre líneas, separadas entre líneas, la distancia entre las palabras, espacios entre las letras, entre líneas, escritura ordenada, márgenes , etc.
Evidentemente no podemos detallar todo porque es imposible en un artículo, pero vamos a dar unos pequeños datos para que cada uno de nosotros podamos muy por encima ver nuestra propia escritura y sacar pequeñas conclusiones.
El orden: ya hemos indicado que la escritura puede ser clara o confusa, organizada o no, centrada en la página, con márgenes o sin ellos…. Este género indica si la persona sabe o no organizarse en el tiempo y espacio, y se adapta bien a las reglas morales y sociales.
La Presión: informa sobre la energía, la firmeza y los gustos materiales, si somos resolutivos, si sabemos vencer los obstáculos que se nos presenta o nos dejamos llevar por los acontecimientos, La escritura puede ser floja, firme, ligera, pastosa. Hay también la escritura en relieve, que es la que nos da la impresión de estar esculpida. Esta escritura es signo del contacto con los seres y las cosas e indica el amor a la naturaleza y gusto por la belleza. El estado de salud también modifica la presión, ya que puede haber temblores, desarticulaciones,…
La velocidad: Indica la actividad, la velocidad de pensamiento y de acción. Puede ser la escritura rápida, lenta, brusca, pausada, acelerada. La interpretación es muy fácil: escritura rápida acción rápida; escritura lenta, lentitud general en todas las acciones. La velocidad ayuda a determinar a las personas temperamentales.
La forma: es el género que ayuda a reconocer la inteligencia. Si siendo legible, se suprimen detalles en la forma de las legras, si se aligera, se dan muestras de ingenio. Si las letras son muy complicadas indica falta de simplicidad y lentitud. Una escritura clara, ordenada, significa orden y sinceridad, opuesta frontalmente a la escritura complicada, poco clara ya que es signo de los defectos contrarios.
Escritura angulosa, en arcos o con guirnaldas; si es en arcos, la persona es realista, si es con guirnaldas es muy intuitiva.
Dirección: Escribimos de izquierda a derecha, en línea horizontal. La persona optimista, el activo tiende a trazar las líneas ascendentes. El pesimista y el perezoso dejan caer las líneas. Evidentemente la fatiga o la enfermedad en el momento de realizarse el escrito puede hacer variar la escritura.
Si se inclina las letras al lado derecho, personalidad activa, dinámica y que piensa en los demás y en el futuro. Si se inclina hacia atrás, personalidad marcada por el miedo, retraída, y se apoya constantemente en el pasado. Escritura recta indica poca entrega, y afirmación.
Dimensión: Una alegría ensancha la escritura, la pena la contrae. Si la escritura es pequeña la persona es minuciosa, y rápida. La escritura grande, a la persona le gusta hacerse notar.
Continuidad: Podemos escribir sin levantar el bolígrafo o bien cada letra separada de la siguiente, o también se puede escribir por grupos de letras.
Escritura sencilla: Modestia, lealtad, sinceridad, franqueza.
Escritura complicada: Ideas confusas, tendencia a huir de la realidad, fantasioso, desconfianza, tendencia a la dispersión, tendencia a huir de la realidad.
Escritura adornada: Pomposidad en todos los campos, capacidad de seducción, imaginativa, superficiales, narcisismo, tendencias artísticas.
Escritura caligráfica: esta escritura mantiene una gran parecido con los modelos caligráficos: Introversión, muy organizado, obediencia, rigidez mental.
Escritura tipográfica: Opuesta a la anterior, se utilizan letras que imitan el modelo imprenta, solo se escribe en mayúsculas, su interpretación : cultura, lucidez, aprovechan bien su energía.
La Rúbrica y la firma
El término rúbrica viene del latín y significa “rojo”. Al pie de la firma se escribía con tinta roja para ofrecer mayor valor al acto de la firma.
La rúbrica y la firma es por decirlo de alguna manera, el concepto que tiene una persona de si misma, pero la rúbrica permite saber las ambiciones y los mecanismos de defensa de una persona.
Las rúbricas mas complicadas suelen pertenecer a personas con una serie de carencias o complejos inconscientes.
Las rúbricas alejadas de la firma: la persona pone barreras, defiende su personalidad, su intimidad, incluso a los mas cercanos.
Rúbrica cercana a la firma: Facilidad para relacionarse con los demás.
Rúbrica que tacha la firma: depende como sea el grado de la tachadura pero por lo general se trata de personas que no acaban de asumir algún aspecto de su vida; si la tachadura es muy evidente, no solo no acepta algún aspecto de su vida, también siente culpabilidad.
Si la rúbrica invade el texto: en la vida suelen invadir el terreno de quienes les rodea.
Si se hace la rúbrica antes de la firma: es una persona que planifica todos sus movimientos. Organizada y cautelosa.
Rúbrica con línea sobre el nombre: dominante, mal genio, impaciente.
El nombre entre dos líneas: obediente, se autolimita.
Rúbrica que rodea la firma: necesidad de protección, egocentrismo.
Sin rúbrica: madurez psicológica, simpleza, individualista.
Rúbrica pequeña: autoconfianza.
Rúbrica grande: Necesidad de protegerse de los demás, reservado.
Rúbrica con lazada: cordialidad, elegancia, coquetería, persona de poco fiar.
Rúbrica en serpentina: cordial, correcto, intrigantes, maliciosos, astutos.
Rúbrica con un punto: prudentes, organizados, pesimistas
Cuando se hacen rayas cortando la firma: detallistas, necesidad de adornar todo lo que cuentan.
Podríamos seguir porque hay cientos de formas de firmar, de rubricar y de escribir, hemos intentado acercar un poquito esta ciencia a todos en forma sencilla. Si estáis interesados podemos ampliar.
Para más información, pide cita en el 987030915